El cambio de color de los árboles arrancó con fuerza con el frío de septiembre pero se fue ralentizando en octubre y noviembre acercándose a la media de otros años. El cénit del otoño se sitúa en la segunda quincena de noviembre. Las cosechas de manzanas y nueces han sido muy abundantes. La vid sufrió un ataque tardío del mildiu por el mal tiempo de septiembre.
EL TIEMPO
Julio fue muy seco en la parte oriental del territorio y normal en el resto. Hubo muchos días con sirimiri. En cuanto a temperatura tuvo carácter cálido aunque hubo pocas horas de sol. En el mes de agosto hubo déficit de precipitación en la vertiente mediterránea y excedente en la cantábrica. En Araba y Bizkaia fue cálido, pero en Gipuzkoa normal. En septiembre ocurrió lo mismo con la precipitación que en el mes anterior y presentó valores fríos en todo el territorio. Octubre fue seco o muy seco en toda la CAV, y en cuanto a temperaturas fue de cálido a muy cálido. Noviembre vuelve a ser diferente en cuanto a precipitación en las dos cuencas: húmedo o muy húmedo en la cantábrica y seco en la mediterránea. En cuanto a temperaturas fue normal para Bizkaia y Gipuzkoa, y frío en Araba. Durante la primera quincena se dan días soleados y noches frías. Diciembre ha sido muy húmedo en todas las provincias, frío en Gipuzkoa y Bizkaia y normal en Araba. Nevadas importantes a primeros de mes. La nieve cuajó en Igeldo.
ÁRBOLES Y ARBUSTOS
Después de un septiembre muy frío y húmedo en Igeldo el otoño avanzó rápidamente. Mirando fotos de las mismas fechas el año pasado se observa que el paisaje permanecía mucho más verde. Septiembre de 2016 fue cálido y normal en cuanto a precipitación. Echando la vista más atrás, hasta 2015, observamos que a comienzos de octubre de ese año el otoño estaba más avanzado que este año. Septiembre de 2015 fue frío y seco. Parece claro que el frío y la escasez de lluvia favorecen el cambio de color y caída de las hojas.
Las condiciones idóneas para un otoño con brillantes colores se dan cuando la estación de crecimiento ha transcurrido con la humedad suficiente y ha sido seguida de un tiempo soleado y seco, pero con suficiente humedad en el suelo. Favorecen las temperaturas templadas de día pero frías de noche, aunque sin heladas. La ausencia de viento y precipitaciones ayuda a mantener más tiempo las hojas en el árbol.
En las fotos vemos el mismo nogal en los tres años entre las mismas fechas de octubre. Se observa la diferencia color y cantidad de hojas.
En la vertiente mediterránea, tras una primavera con escasas lluvias, el estrés hídrico provocó que muchas hayas comenzaron a perder hojas en agosto. Para mediados de noviembre la mayoría de hayas en Araba no tenían hojas.
Si tuviéramos que elegir una fecha para cifrar el máximo esplendor del otoño en la vertiente cantábrica sería el 19 de noviembre. Los días fríos y despejados de la semana anterior despertaron los colores que quedaban por salir en las hojas. Las heladas no fueron tan fuertes como para hacerlas caer. El día 1 en la visita al jardín botánico de Iturraran (Aia_Pagoeta) faltaban colores otoñales La ausencia de noches frías hizo que no cambiara el color de las hojas, y como tampoco hubo mucho viento sur este otoño los árboles mantenían bastante follaje, 20 días después brillaban el rojo, naranja y amarillo.
En Igeldo ha sido complicadísimo cifrar la fecha del cambio de color, aquí los verdes se van pero no se sustituyen por amarillos u ocres, antes caen las hojas que cambian de color, por lo menos este año. Se ve muy poca diferencia con la media en cuanto a la fecha de caída de hoja en fresnos, sí que está más adelantado que el año pasado; pero el otoño 2016 fue muy atrasado. El resto del otoño ha seguido su curso normal.
COSECHAS FRUTALES
Las cosechas de manzanas y nueces han sido muy buenas, gran cantidad de frutos. Las manzanas especialmente abundantes, se adelantaron en la fecha de maduración. Tuvieron ataques de carpocapsa por las altas temperaturas del verano. Las nueces, aunque numerosas, no tuvieron la calidad deseada, con los frutos poco carnosos, también debido a que durante la maduración sufrieron por el calor.
La cosecha de uva para txakoli se presentaba magnífica en agosto pero el tiempo húmedo y frío de septiembre hizo que apareciera el mildiu y arruinara parte de las cosechas.
En Mungia los robles han dado una cantidad de bellotas extraordinaria.
SETAS
En el valle de Ultzama (norte de Navarra) la recolección de hongos se adelantó a principios de agosto cuando lo habitual es que sea a finales de agosto o principios de septiembre. La segunda quincena de julio fue calurosa y húmeda debido a la precipitación generada por varias tormentas que dejaron más de 70 litros en la zona. Con estas condiciones de humedad, y si hace bastante calor, surgen los hongos (Boletus edulis) dos o tres semanas después.
En octubre apenas había Boletus en robledales y hayedos, y se adelantó su recolección en zonas de pinos y abetos.
AVES
En la reserva de Urdaibai están asombrados con la cantidad de aves invernantes que están llegando desde noviembre: pinzones reales, zorzales reales, picogordos, lúganos… procedentes del norte.
Sobre el 20 de diciembre se vieron Ampelis eurpeos, una especie muy rara de ver en esta latitud y que normalmente se acerca cuando el frío es muy intenso en el norte.
Notas:
- En Ultzama los robles americanos no llegaron a colorear de rojo su follaje porque unos fuertes vientos tiraron sus hojas en pocos días a finales de octubre.
- Los primeros crocus florecen en el bosque en Mungia el 8 de octubre.
- El 20 de noviembre todos los tilos en Donosti tenían el follaje amarillo.
- El 1 de diciembre cae una nevada en Igeldo y se acumulan más de 10 cm en el jardín del observatorio.
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