El otoño fenológico comienza en julio y acaba en diciembre. En estos meses los frutos maduran, la hojas cambian de color y caen al suelo y las aves migran. Todos estos cambios se relacionan con el tiempo que afecte a una zona durante estos meses. En este resumen analizaremos cómo ha sido este otoño en el País Vasco.
Fresnos (27/8,12/9,30/9,14/11,25/11 y 1/12)
El Tiempo
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Julio fue cálido y seco aunque el sol lució poco este mes. Agosto fue un mes cálido y muy seco; se batieron efemérides por temperaturas máximas en Bilbao y Vitoria. El mes de septiembre fue húmedo y cálido, en octubre predominó el viento sur y, en cuanto a precipitación fue un mes seco. Noviembre se encuentra dentro de la normalidad en temperaturas pero tuvo mucha precipitación, sobre todo concentrada en los primeros días del mes. Diciembre fue sorprendentemente cálido y seco, con muchos días soleados
Hasta mediados
de julio, gracias al alto grado de
humedad generado por las brumas y el sirimiri, el paisaje se mantuvo de un
verde intenso hasta el final de la segunda decena, ya que dos jornadas muy
calurosas provocaron que algunas hojas quedaran mustias y cayeran. El calor de agosto ayudó a la correcta maduración
de los frutos.
En septiembre comenzó tímidamente a anunciarse el otoño con manchas
amarillas en las hojas y erizos de castaña en el suelo. Aún así, a mediados de
mes, el paisaje en Igeldo seguía fresco. Lo mismo se pudo observar en Urkiola,
sobre todo en la vertiente cantábrica en estas fechas eran muy pocos los signos
otoñales, a excepción de los bordes de las hojas en algunas hayas.
La estación
iba con un ligero retraso a lo habitual. Como dato a destacar: la muy abundante
cosecha de hayucos. A finales de mes en Iturraran (Aia, Gipuzkoa) no se
observaron demasiados tonos rojizos u ocres. El paisaje no había dado todavía
el cambio de color.
A mediados de octubre el otoño ya avanza por el
paisaje de Igeldo, pero en comparación con la media de años anteriores, hay más
hojas en los árboles que siguen verdes. En esta época hay un desprendimiento
masivo de castañas, la cosecha es muy abundante. También los nogales están
cargados de nueces. El calor de agosto y septiembre ayudó a que estos árboles
hayan tenido una gran cosecha este otoño. Sobre
el día 20 se apilan las manzanas
en la puerta de las sidrerías. Este año la cosecha no fue muy abundante, ya que
los manzanos son veceros, y era año de poco fruto en esta zona de Gipuzkoa. Sin
embargo, la calidad ha sido muy buena, la falta de lluvia durante la maduración
del fruto hizo que este sea dulce. A finales de mes, no se observan grandes
cambios en el paisaje, la falta de heladas y la abundante humedad producida por
las nieblas matinales y el rocío contribuyen a mantener las hojas en los
árboles.
A mediados de noviembre siguen con hojas abedules,
fresnos, robles y avellanos pero en la tercera decena los árboles pierden hojas
rápidamente y apenas mantienen algunas a comienzos de diciembre en castaños, sauces y abedules. Los primeros cambios de
color en amentos de avellanos se observan a finales de este mes en Igeldo y
unos días antes en Mungia.
El momento de
mayor colorido otoñal se situaría sobre el 10 de noviembre cuando todavía
muchos árboles conservaban sus hojas con el cambio de color
Huertas
Julio fue un mes muy húmedo; aunque no
cayera mucha precipitación hubo muchas nieblas y días de llovizna. Esto no
favoreció a cultivos como el tomate que necesita sol y tiempo seco, así que
durante este mes hubo que tratar las plantas con cobre para evitar la
propagación del mildiu. Los calores de mediados de mes quemaron las flores de
las plantas de pimientos, que dieron menos cosecha de la habitual
Agosto, tan seco y cálido, no fue bueno
para los cultivos, que aunque se regaran no pudieron evitar quemaduras. Por un
lado, el calor impidió la aparición del mildiu, por encima de 30ºC no puede vivir; pero
ayudó a la aparición de plagas. Así el gusano de las manzanas (Carpocapsa) tuvo
varios picos en la temporada, cuando lo habitual es que tenga dos.
El tiempo
cálido en septiembre y el resto del
otoño ayudó a que los frutos maduraran correctamente y las plantas de hoja han
seguido creciendo hasta muy avanzado el otoño.
La cosecha de
nueces y castañas has sido excelente, estos árboles soportan bien el calor y la
escasa acumulación de horas-frío del otoño-invierno 2015/2016 no ha parecido
afectarles.
Aves
Las aves
abandonaron nuestro territorio (migración post nupcial) con cierto retraso ya
que las condiciones climáticas seguían siendo buenas.
Las aves que vienen a pasar el invierno o de paso desde
zonas más frías están llegando con retraso debido a que el otoño en zonas más
al norte no está siendo muy duro, aunque los primeros temporales otoñales en el
norte de Europa propiciaron una fuga de tempero para algunas especies.
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